El aval político a los asesinos de uniforme no es nuevo. La vieja escuela noventista de “salir a meter bala a los delincuentes” del ex gobernador Carlos Ruckauf fue actualizada en la gestión de Daniel Scioli y su ministro de Inseguridad Alejandro Granados. Los resultados a la vista: el gobierno bonaerense con mayor cantidad de casos de gatillo fácil en tres décadas. Más de 5 mil son los casos que esa doctrina se viene cobrando desde concluida la dictadura militar y comenzada la democracia de represión como control social. Más de 215 casos de desaparición forzada desde 1983 a la fecha. Macri, Bullrich y Ritondo quieren crear miles de Chocobar para contener el conflicto social que su política económica está agravando.
SI ES INSTITUCIONAL NO ES VIOLENCIA, ES REPRESIÓN DE ESTADO.