Jorge Julio López continúa desaparecido. El próximo viernes se cumplirán 8 meses de su secuestro y desaparición, cuando el testigo y querellante en la causa contra el genocida Miguel O. Etchecolatz, debía avalar con su presencia los alegatos en el juicio.
Por otra parte, las agrupaciones Surcos y Tinta Roja, con la participación del Colectivo Siempre, convocaron el domingo próximo a las 16 hs en la Plaza Islas Malvinas a una Jornada Cultural en la cual habrá, entre otras cosas, una radio abierta, proyección de videos y una muestra fotográfica.Días atrás el diario La Nación publicó una nota en la cual daba a conocer una supuesta nueva línea de investigación a raíz de una serie de cartas enviadas a la Justicia por un detenido de la Unidad 26, en las que aseguraba haber presenciado una conversación en la que un ex miembro del Servicio Penitenciario le ofrecía dinero a dos presos para realizar un secuestro "en el que ganarían mucha plata". Según el relato de este testigo, uno de los detenidos -al que le encargaron el secuestro- habría sido integrante de las fuerzas de seguridad durante la época de la última dictadura militar. Ese diálogo dentro del penal habría tenido lugar nueve días antes de que López desapareciera.
Por otra parte, en la causa por los crímenes cometidos en el Centro Clandestino de Detención "Destacamento de Arana" (uno de los lugares en los que estuvo detenido López en el año 1976) quedó detenido el represor Rubén Oscar Páez, uno de los jefes de la Brigada de Investigaciones de La Plata durante la dictadura. Sin embargo, a pesar del histórico y constante de reclamo de los organismos de derechos humanos sobre la necesidad de cárcel común para los imputados por delitos de lesa humanidad, Páez fue beneficiado con el arresto domiciliario.
Vale destacar que ante la inminencia del juicio contra el represor Christian Federico Von Wernich, el juez federal del Tribunal Oral Nº 1 de La Plata Carlos Rozanski (quien presidió el juicio a Etchecolatz y presidirá ahora el juicio a Von Wernich) fue amenazado en reiteradas oportunidades. De la misma forma fue amenazada la testigo y querellante contra Etchecolatz, Nilda Eloy. Justicia Ya La Plata repudió las amenazas y denunció que desde el gobierno "nada se ha avanzado en la investigación de la desaparición del compañero ni en el esclarecimiento de las múltiples intimidaciones recibidas".
