(AW) Fabián Gallardo sufrió en una semana dos embestidas de la misma fuerza de seguridad que asesinó a su amigo Diego Bonefoi el año pasado. Este hecho no es mera coincidencia, es una muestra más de que la Policía de Río Negro, como tantas otras de la Argentina, está dedicada a amedrentar, estigmatizar y asesinar a los jóvenes del país.